SOBRE OS CUSTOS DA IMIGRAÇÃO EM ESPANHA

España se ha convertido en el país con más inmigrantes de Europa (multiétnico le dicen los progres) y el segundo del mundo, después de Estados Unidos. El porcentaje de inmigrantes que han llegado a España es casi ya del 10% de la población. Y es que España desbanca por primera vez a Francia en número de inmigrantes, nada más y nada menos que el 9,9 % de la población de nuestro país es ya inmigrante, según el II Anuario de la Comunicación del Inmigrante en España, presentado ayer en Madrid. Son datos referidos a 2006, por lo que a estas alturas seguramente el porcentaje real de la población inmigrante en España roce el 11 %.

Sin embargo, como todo sabrán, España no es la segunda potencia económica mundial, Por supuesto no superamos a Francia y no nos acercamos ni de lejos a la economía de EE.UU. ¿Cómo entonces es posible que seamos capaces de asimilar más inmigrantes que muchos países de nuestro entorno mucho más prósperos? La respuesta es que en realidad nos somos capaces.

El número de inmigrantes, como es lógico, debería correr parejo, al menos aproximadamente, a nuestra posición económica en el mundo. Si esto no es así es porque en España sufrimos una grave anomalía debido a las políticas de permisividad con la inmigración.

Y según las intenciones del gobierno del PSOE, plasmadas en el anuario, las previsiones para el año 2025 son que en España tenga más de 8 millones de nuevos residentes, es decir un 30 % de la población inmigrante. Semejante porcentaje equivale simple y llanamente a la destrucción de la identidad cultural de España.

Se siguen ocultando los costes en prestaciones sociales

Los efectos pueden ser devastadores para nuestra sociedad.

La directora de Etnia Comunicación, Ana Calderón, responsable del Anuario de la Comunicación del Inmigrante en España, sigue insistiendo en que el colectivo de inmigrantes se sitúa como uno de los principales motores económicos del país y añadió que este año gastarán 40.000 millones de euros en bienes y servicios, principalmente destinados a la compra de alimentación y a pagar deudas, cifra que supone un 14 por ciento más que el año anterior.

Sin embrago no dice que 7.000 millones de esos 40.000 millones corresponden a remesas que envían los inmigrantes a sus países de origen y tampoco se ofrece cifra alguna del incremento del gasto público derivado de la inmigración.
Sabemos que la Generalidad reclama al gobierno central 1.000 millones de euros por tal concepto y que solo la secretaria de Estado de Inmigración y Emigración, gastará el año que viene 312 millones de euros, un 556% más que en 2004. Muy relevantes son los datos revelados por el secretario general de la Cruz Roja Española, Leopoldo Pérez, que ha asegurado que la inmigración irregular se ha convertido en la primera causa de intervención de los efectivos de esta institución.

Un 6, 4 % de los parados que cobran subsidios son inmigrantes, con un presupuesto de 44.143 millones de euros, la partida correspondiente al gasto debido a la inmigración suma más de 2.500 millones de euros, a lo que hay que añadir el gasto sanitario cuyas cifras nadie sabe ni se aventura a calcular. Suma y sigue. Cantidades a las que hay que añadir los gastos asistenciales, la ayuda de 2.500 euros por hijo nacido que supondrá 1.550 millones de euros anuales, 784 millones adicionales para las nuevas ayudas al alquiler de vivienda, y el plan de salud bucodental que se llevará entre 160 y 200 millones al año,

Seguimos preguntando ¿Cuánto nos cuesta la inmigración? ¿La economía de quien favorece de verdad? ¿Son los trabajadores quines pechan con el coste de la inmigración y la empresa con los beneficios?

E em Portugal, como será?

Porque é que não há números divulgados publicamente?