sexta-feira, março 02, 2012

NO PAÍS IRMÃO - NACIONALISTAS CATALÃES DENUNCIAM MESQUITA ILEGAL E ELITE REINANTE QUE PACTUA COM A ISLAMIZAÇÃO

Mientras el presidente de la Generalitat de Cataluña Artur Mas rinde pleitesía en Marruecos al rey Mohamed VI, el presidente de Plataforma per Catalunya (PxC) Josep Anglada, junto al secretario general de la formación, Robert Hernando y varios vecinos acudieron al pleno ordinario del Ayuntamiento de Sant Vicenç de Castellet (Barcelona), para protestar contra la existencia de mezquita ilegal en la zona.
Este supuesto oratorio islámico existe gracias a la benignidad con los musulmanes del Consistorio, gobernado por CIU, que mira hacia otra parte. Incluso es capaz de negar su existencia, pese a las aplastantes evidencias que existen, entre ellas el hecho de que la comunidad musulmana no lo oculte e incluso exija dinero para financiar sus actividades dentro del local.
La mezquita, situada en el número 15 de la calle Clot del Tufau, ha provocado ya la indignación de muchos vecinos de la población, que no quieren que su pueblo se convierta en un segundo Salt.
Durante el pleno, vecinos y militantes de Plataforma per Catalunya desplegaron pacíficamente unas pancartas de protesta, mientras el alcalde, con el rostro demudado, pidió a voces su retirada.
Josep Anglada señaló al respecto: “Es una vergüenza y una falta de respecto que cualquier persona o empresa que quiere montar un negocio tenga que tener de antemano todos los permisos pertinentes y, en el caso de las mezquitas, se haga la vista gorda, cuando sabemos, porque lo han dicho las fuerzas de seguridad del Estado, que muchas de ellas son centros potenciales de formación de terroristas islámicos”. Añadió el vicense que “la construcción de una mezquita fracturaría la convivencia en Sant Vicenç de Castellet y propiciaría la creación de un gueto que iría ganando terreno al paisaje vecinal de toda la vida”.
En este sentido, el líder identitario aseguró que “cada mezquita que se levanta es un paso adelante en el asentamiento de una sociedad paralela, la musulmana, sin ningún tipo de interés en abandonar una cultura retrógrada y rechazar los valores que nos han permitido construir sociedades libres en Europa”.
Anglada dijo sentir pena al ver ”cómo el presidente de la Generalitat se baja los pantalones delante de un dictador islamista como Mohamed VI” y atribuyó esta sumisión al hecho de que muchos alcaldes de CiU, como los de Salt y Sant Vicenç de Castellet, “le abran la puerta al islamismo de forma tan descarada”. Y añadió: “Pese a quien pese y caiga quien caiga, Plataforma per Catalunya estará protestando allí donde se construya una mezquita, legal o ilegal, porque no las queremos en nuestra tierra”.
Advirtió que “la próxima estación probablemente sea la Badalona de Albiol”, donde ya existe un proyecto en ciernes.