O CRESCENTE QUE SE TRANSFORMARÁ EM FOICE - A MORTE DO OCIDENTE
Outro texto de antologia - uma entrevista, feita a um catedrático especialista em estudos árabes, sobre o possível ou até provável futuro da Europa.
Bernard Lewis pronostica una Europa islámica
Extracto de la entrevista publicada por el semanario alemán ‘Die Welt’ al arabista Bernard Lewis, catedrático de la Universidad de Princeton, el 28 de julio de 2004.
DIE WELT: La lucha contra Al Qaida, ¿va a durar decenios?
Lewis: Creo que es un proceso largo y los resultados no son de ninguna manera seguros. Se debe tomar en cuenta la posibilidad de que Al Qaida gane. Tienen muchos aliados en Occidente, conscientes e inconscientes. Entre los conscientes cuento las crecientes minorías islámicas y los conversos en Europa. Ésta se comporta ahora de forma parecida a como antes lo hacía con el comunismo, pues a los infelices de Occidente les gustaba que se les dieran respuestas unívocas. Esa es también la fuerza de atracción de las personas al islam radical. Les proporciona convicciones y certezas, les da el sentido de una misión. Aparecen unidos, mientras las democracias lo hacen profundamente divididas.
DIE WELT: ¿Se acerca entonces un imperio islámico global?
Lewis: En las democracias parece que las personas se odian más que a los adversarios exteriores. La debilidad y la división parece que dominan al lado occidental. La política en Europa no ayuda a superarlo, en especial la política francesa y alemana.
DIE WELT: ¿Es Al Qaida aún lo suficientemente poderosa para cometer un atentado parecido al del 11 de septiembre de 2001?
Lewis: Sí. Antes de aquel atentado hubo una larga sucesión de ataques a instituciones americanas. Los radicales se vieron estimulados puesto que faltó una auténtica fuerza para hacerles frente. Después del 11 de septiembre quedaron impactados por la dureza de la nueva administración USA en Afganistán e Iraq. Entonces Al Qaida vio en los debates occidentales debilidades y división. Naturalmente se sintieron con ánimos renovados y volvieron a empezar, entre otros sitios en España, pues ésta retiró sus tropas de Iraq. Sin duda habrá nuevos ataques.
DIE WELT: ¿Qué causas existen para la división entre USA y la UE?
Lewis: Desde alguna perspectiva podría cambiar el nombre de la UE para denominarla “cooperativa de envidias”. Está muy claro que los europeos alimentan reservas contra América que han sido llevadas muy lejos. Por eso los europeos entienden bien a los musulmanes, porque también se sienten adversarios de América.
DIE WELT: ¿Constituirá la UE un contrapeso global a América?
Lewis: No. Junto a los Estados Unidos serán actores globales China, India y, posiblemente, una Rusia recuperada. Seguramente nadie sabe qué tipo de poder habrá en Moscú, pero ciertamente no será comunista. Europa será una parte del occidente árabe, del Magreb. A favor de ello cuentan la emigración y la demografía. Los europeos se casan tarde y no tienen ningún o muy pocos niños. Pero existe una fuerte emigración: turcos en Alemania, árabes en Francia y pakistaníes en Inglaterra. Éstos se casan pronto y tienen muchos niños. Siguiendo las tendencias actuales habrá mayorías musulmanas en la población europea lo más tarde a finales del siglo XXI.
Fuente
http://www.welt.de/data/2004/07/28/310913.html
http://www.welt.de/data/2004/07/28/310913.html?s=2
http://www.welt.de/data/2004/07/28/310913.html?s=3
http://www.welt.de/data/2004/07/28/310913.html?s=4
Bernard Lewis pronostica una Europa islámica
Extracto de la entrevista publicada por el semanario alemán ‘Die Welt’ al arabista Bernard Lewis, catedrático de la Universidad de Princeton, el 28 de julio de 2004.
DIE WELT: La lucha contra Al Qaida, ¿va a durar decenios?
Lewis: Creo que es un proceso largo y los resultados no son de ninguna manera seguros. Se debe tomar en cuenta la posibilidad de que Al Qaida gane. Tienen muchos aliados en Occidente, conscientes e inconscientes. Entre los conscientes cuento las crecientes minorías islámicas y los conversos en Europa. Ésta se comporta ahora de forma parecida a como antes lo hacía con el comunismo, pues a los infelices de Occidente les gustaba que se les dieran respuestas unívocas. Esa es también la fuerza de atracción de las personas al islam radical. Les proporciona convicciones y certezas, les da el sentido de una misión. Aparecen unidos, mientras las democracias lo hacen profundamente divididas.
DIE WELT: ¿Se acerca entonces un imperio islámico global?
Lewis: En las democracias parece que las personas se odian más que a los adversarios exteriores. La debilidad y la división parece que dominan al lado occidental. La política en Europa no ayuda a superarlo, en especial la política francesa y alemana.
DIE WELT: ¿Es Al Qaida aún lo suficientemente poderosa para cometer un atentado parecido al del 11 de septiembre de 2001?
Lewis: Sí. Antes de aquel atentado hubo una larga sucesión de ataques a instituciones americanas. Los radicales se vieron estimulados puesto que faltó una auténtica fuerza para hacerles frente. Después del 11 de septiembre quedaron impactados por la dureza de la nueva administración USA en Afganistán e Iraq. Entonces Al Qaida vio en los debates occidentales debilidades y división. Naturalmente se sintieron con ánimos renovados y volvieron a empezar, entre otros sitios en España, pues ésta retiró sus tropas de Iraq. Sin duda habrá nuevos ataques.
DIE WELT: ¿Qué causas existen para la división entre USA y la UE?
Lewis: Desde alguna perspectiva podría cambiar el nombre de la UE para denominarla “cooperativa de envidias”. Está muy claro que los europeos alimentan reservas contra América que han sido llevadas muy lejos. Por eso los europeos entienden bien a los musulmanes, porque también se sienten adversarios de América.
DIE WELT: ¿Constituirá la UE un contrapeso global a América?
Lewis: No. Junto a los Estados Unidos serán actores globales China, India y, posiblemente, una Rusia recuperada. Seguramente nadie sabe qué tipo de poder habrá en Moscú, pero ciertamente no será comunista. Europa será una parte del occidente árabe, del Magreb. A favor de ello cuentan la emigración y la demografía. Los europeos se casan tarde y no tienen ningún o muy pocos niños. Pero existe una fuerte emigración: turcos en Alemania, árabes en Francia y pakistaníes en Inglaterra. Éstos se casan pronto y tienen muchos niños. Siguiendo las tendencias actuales habrá mayorías musulmanas en la población europea lo más tarde a finales del siglo XXI.
Fuente
http://www.welt.de/data/2004/07/28/310913.html
http://www.welt.de/data/2004/07/28/310913.html?s=2
http://www.welt.de/data/2004/07/28/310913.html?s=3
http://www.welt.de/data/2004/07/28/310913.html?s=4
posted by Caturo at quarta-feira, fevereiro 02, 2005
4 Comments:
Só na Alemanha, em 2002, já havia 100.000 Alemães convertidos ao Islão!...
E, por tudo o que o Islão Fundamentalista anda a fazer, deveras que não percebo porque é que os estão sempre a vitimizar, a fechar-lhe os olhos... É que até para eles é mau!... Realmente, uma coisa é certa: a Direita pode ser louca, mas a Esquerda é estúpida!...
Imperador
Só na Alemanha, em 2002, já havia 100.000 Alemães convertidos ao Islão!...
E, por tudo o que o Islão Fundamentalista anda a fazer, deveras que não percebo porque é que os estão sempre a vitimizar, a fechar-lhe os olhos... É que até para eles é mau!... Realmente, uma coisa é certa: a Direita pode ser louca, mas a Esquerda é estúpida!...
Imperador
Já lhe falei uma vez dum livro, no www.dixienet.org, "The Death of the West", que falava do mesmo problema.
Imperador
E cá está a confirmação da Questão Climatérica (com o seu peso em tudo o resto).
http://sic.sapo.pt/index.php?article=15293&visual=3&area_id=5
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EPA/Yuri Kochetkov
Última actualização: 2005-02-02 17:02
Temperaturas no Atlântico Norte podem descer 10 graus
Peritos alertam para eventual interrupção da corrente do Golfo
As temperaturas no Atlântico Norte podem descer entre cinco a 10 graus até ao final do século com a eventual interrupção da chamada corrente do Golfo, que assegura à Europa uma clima ameno, alertaram hoje especialistas.
O efeito continuado da fusão dos gelos da Gronelândia e Árctico com o aumento da massa de água doce decorrente da chuva pode acabar, até ao final do século, com a circulação dessa corrente de água quente proveniente do golfo do México e que se dirige para o Atlântico Norte.
Este foi um dos alertas feitos hoje na conferência internacional sobre alterações climáticas que decorre até quinta-feira em Exeter, Inglaterra, com a participação de cerca de 200 cientistas.
Segundo o norte-americano Mike Schlesinger, há 45 por cento de hipóteses de se dar a interrupção da corrente do Golfo, devido às alterações climáticas.
Schlesinger explicou que o aumento de três graus da temperatura do planeta previsto para este século, e que é considerado muito provável, faz com que haja 45 por cento de possibilidades de que a corrente deixe de circular até ao ano 2100.
Mesmo que os políticos mundiais concordassem em aplicar impostos muito elevados à emissão de dióxido de carbono pela indústria, haveria cerca de 25 por cento de probabilidade de que a grande massa de água quente deixasse de circular e de exercer o seu efeito benéfico no clima europeu, adiantou o especialista da Universidade de Illionois.
Segundo investigações do centro britânico Hadley para o estudo das alterações climáticas, nalgumas zonas do Atlântico Norte as temperaturas poderão descer entre cinco a 10 graus.
Se a corrente do Golfo deixasse de funcionar a meio deste século, o clima na Grã-Bretanha seria mais frio do que o registado nos séculos XVII e XVIII, período conhecido como a "pequena idade do gelo", quando as águas do rio Tamisa chegaram a gelar.
Com Lusa
Imperador
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